Un posible acuerdo entre municipios cántabros y el ejecito puede reintroducir especies autóctonas en el medio rural de la comunidad
Influenciado por la cercana Yeguada Militar de Ibio, el municipio
cántabro de San Felices de Buelna lleva celebrando desde 2010 una de las ferias
caballares más importantes de la región, que reúne los esfuerzos de muchos ganaderos
de la comunidad autónoma por el mantenimiento de algunas especies propias de la Cordillera Cantábrica,
como la raza Monchina, un tipo de caballo rural, fuerte y habituado a la vida
en zonas de montaña que existe en nuestra comunidad en escaso número en
libertad, menos aun en explotaciones extensivas de la zona y que puede ser
visto tan solo en semilibertad en el parque de la naturaleza de Cabarceno.
El municipio persiste en esta línea de protección de especies, y preocupado por la gestión de sus bosques ha o comenzado a estudiar, según nos ha confirmado el concejal de medio ambiente de San Felices, un plan de reintroducción de esta raza propia de Cantabria.
El proyecto, que contaría con el beneplácito de las unidades de caballería de la zona y el ministerio de defensa, emplearía las instalaciones de la Yeguada que el ejército posee en Ibio, sus veterinarios y sus conocimientos en crianza y doma para crear una cabaña de monchinos que podrían ser empleados, dadas sus características en las tareas de desbroce y limpieza de los montes del municipio.
Ello permitiría no solo ampliar el número de animales de esta raza y reintroducirlos en las explotaciones ganaderas, si no plantear un plan de protección forestal y de prevención de incendios forestales poco agresivo con el medio ambiente al evitar la creación de amplias y devastadoras pistas forestales para la introducción de maquinaria en los bosques, tarea que estos caballos podrías hacer.
Un proyecto de protección rural sostenible que puede alcanzar dos importantes objetivos en nuestra comunidad.
Imagen UCA magacines