Lluís Companys i Jover fue un político y abogado catalán, presidente de la Generalidad de Cataluña entre 1931 y 1934, y nuevamente entre 1936 y 1939.
Nació en Barcelona el 21 de junio de 1882. Estudió derecho en la Universidad de Barcelona y se doctoró en 1906. Se afilió a la Unión Catalanista en 1901 y a Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) en 1917.
En 1931, tras la proclamación de la Segunda República Española, fue elegido presidente de la Generalidad de Cataluña. Durante su primer mandato, se centró en la reforma agraria y en la promoción de la cultura catalana.
En 1934, Companys proclamó el Estado Catalán dentro de la República Federal Española. Esta acción fue condenada por el gobierno central, que envió tropas a Cataluña para restablecer el orden. Companys fue detenido y condenado a prisión.
En 1936, tras el estallido de la Guerra Civil Española, Companys fue liberado y volvió a presidir la Generalidad de Cataluña. Durante este periodo, se centró en la defensa de Cataluña frente al bando franquista.
En 1939, tras la victoria del bando franquista, Companys fue detenido y trasladado a Francia. En 1940, fue extraditado a España y juzgado por rebelión militar. Fue condenado a muerte y fusilado el 15 de octubre de 1940 en el castillo de Montjuïc de Barcelona.
La muerte de Companys fue un acontecimiento muy importante en la historia de Cataluña. Se convirtió en un símbolo de la resistencia catalana contra el franquismo.
Las causas de la muerte de Companys son aún objeto de debate. La versión oficial del franquismo fue que fue ejecutado por un pelotón de fusilamiento, pero hay quienes sostienen que fue asesinado extrajudicialmente.
En 1979, tras la muerte de Franco, los restos de Companys fueron exhumados y trasladados al Panteón Nacional de Cataluña.
Companys es considerado una figura clave en la historia de Cataluña. Su legado es objeto de controversia, pero es indiscutible que fue un líder carismático y un defensor de la autonomía catalana.
Lluís Companys i Jover fue un político catalán de ideología catalanista y republicana. Su ideología se puede dividir en dos grandes bloques:
Catalanismo: Companys era un ferviente defensor de la identidad catalana y la cultura catalana. Creía que Cataluña era una nación con derecho a la autodeterminación.
Republicanismo: Companys era un republicano convencido. Creía que la monarquía era un sistema antidemocrático y que España debía ser una república.
En su discurso de investidura como presidente de la Generalitat de Cataluña en 1931, Companys declaró:
“Cataluña es una nación que tiene derecho a la vida, a la libertad y a la felicidad. Por eso, Cataluña proclama su independencia de la monarquía española y se constituye en república”.
En la práctica, la ideología de Companys se tradujo en una serie de medidas en favor de la autonomía catalana, como la creación de la Generalitat de Cataluña, la aprobación del Estatuto de Autonomía de Cataluña de 1932 y la reforma de la enseñanza para fomentar el uso del catalán.
Durante la Guerra Civil Española, Companys lideró la resistencia catalana contra el ejército franquista. En 1940, fue detenido por las fuerzas franquistas y ejecutado en el castillo de Montjuïc.
Los principales aspectos de la ideología de Lluís Companys se pueden resumir en los siguientes puntos:
Catalanismo:
Cataluña es una nación con derecho a la autodeterminación.
La cultura catalana debe ser protegida y promovida.
La lengua catalana debe ser la lengua oficial de Cataluña.
Republicanismo:
La monarquía es un sistema antidemocrático.
España debe ser una república.
La democracia debe ser defendida frente a cualquier amenaza.
Companys fue un líder carismático y un destacado defensor de la causa catalana. Su figura sigue siendo un referente para muchos catalanes, por eso hoy los partidos secesionistas se han reunido para conmemorar su figura en el aniversario de su muerte