El crimen de Sandra Palo

0 122

La secuestraron a punta de navaja cuando esperaba el autobús junto a un amigo, en Madrid.

Cuatro jóvenes, 18, 16 y 14 años, la banda del chupete se hacían llamar, la violaron por turnos

en un descampado. Cuando terminaron, mientras Sandra trataba de vestirse y escapar lo mas rápido posible, decidieron matarla por miedo a que los pudiera delatar. Robaron un coche y la atropellaron con el empotrándola contra un muro. Ella se cayó a el suelo y pasaron varias veces por encima de su cuerpo, marcha adelante y marcha atrás, al menos 10 veces, recordaron los asesinos.

Después decidieron quemarla para destruir cualquier huella que pudiera incriminarles. Se dirigieron los cuatro hasta una estación de servicio y allí compraron gasolina. Cuando volvieron Sandra seguía viva a pocas penas, agonizando e intentando huir despacio, la rociaron de combustible y la prendieron fuego. La autopsia determinó que la quemaron viva.

La sentencia se ajustó a la ley del menor, vigente a día de hoy. Los dos condenados de 16 años pasaron 8 años de privación de libertad en un centro de menores y los otros 5 de libertad vigilada.

El más pequeño, de 14 años, estuvo 4 años en un centro y 3 de libertad vigilada. Y el mayor de edad, de 18 años , fue condenado a 64 años de cárcel. La memoria de Sandra Palo se mantiene viva a través de la lucha de su madre. Marimar Bermúdez lleva 15 años batallando por la reforma de la ley del menor. Sus gritos, con el rostro desencajado, durante el juicio del mayor de los asesinos de su hija aún retumban en las conciencias de los políticos con los que se ha entrevistado en todos estos años.

Durante los primeros meses tras el crimen y al conocer los detalles y el sufrimiento que padeció su hija, se quedó sin habla. Era tanto el dolor que estuvo un tiempo sin poder articular una sola palabra. Cuando recuperó la voz decidió que el suyo debería ser el grito de las víctimas de segunda categoría: las asesinadas a manos de menores de edad. El menor de 16 años confesó ser el autor del asesinato de Leticia Rosino, de 33 años.

La familia de la víctima, liderada por la pareja de la joven, David Alonso, ha iniciado una campaña en la que se suma otras voces como la madre de Sandra Palo y que exigen una reforma de la ley del Menor, que a día de hoy los políticos y trabajadores sociales prefieren dejarla como está.

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.

This website uses cookies to improve your experience. We'll assume you're ok with this, but you can opt-out if you wish. Accept Read More