El descubrimiento de América se trata de uno de los momentos cumbre de la historia universal fue uno de los hechos más importantes de la historia europea porque significó el encuentro de dos mundos humanos que se habían desarrollado independientemente, sin que uno conociera la existencia del otro. Supuso el mayor ensanchamiento de las fronteras oceánicas de Europa y condicionó la evolución política, social y económica de los siglos siguientes.
Las crecientes dificultades del Imperio Bizantino, que finalmente caería con la toma por los turcos de Constantinopla en 1453, forzaron a los europeos occidentales a buscar rutas alternativas a Asia.
Cristóbal Colón, en representación de los Reyes Católicos de Aragón y Castilla, realizó cuatro famosos viajes desde Europa a América en 1492, 1493, 1498 y 1502. Había estado a las órdenes del rey de Portugal y ofreció a los Reyes Católicos el proyecto de llegar a las Indias siguiendo una ruta hacia el oeste en lugar de bordeando todo el continente africano. Para poner en práctica su proyecto, Colón partía de la idea de la esfericidad de la Tierra, cuestión controvertida en la época. Finalmente, el 17 de abril de 1492 se firmaron las Capitulaciones de Santa Fe por los cuales se autoriza y financia la expedición y estipulaba las condiciones en que Cristóbal Colón haría el viaje descubridor.
Las capitulaciones de Santa Fe concedieron a Colón el título de almirante de la expedición, virrey de la tierra que conquistaran y el diez por ciento de las riquezas que pudiera traer a España.
Durante mucho tiempo Colón siguió creyendo que había llegado a Asia por la ruta occidental, pero en realidad se había encontrado con la existencia de un continente desconocido en Europa: América.
Ultimados los preparativos la expedición parte del puerto de Palos de la Frontera en Huelva, el 3 de agosto de 1492. La escuadra colombina estaba formada por las carabelas Pinta, Niña y la Santa María. La Pinta y la Niña fueron elegidas por los hermanos Pinzón. La tripulación estaba formada por unos 90 hombres aproximadamente y acompañado en la empresa por los hermanos Martín y Alonso Pinzón y los hermanos Niño.
Después de 72 días de navegación, el 12 de octubre de 1492. Cuando ya se habían agotado todos los cálculos y previsiones realizadas por Colón, se oyó desde la Pinta el famoso grito del marinero Rodrigo de Triana «¡Tierra a la vista!», dos horas después de la medianoche del 12 de octubre.
Desembarcaron al día siguiente en la isla de Guanahaní (bautizada San Salvador). Continuó su viaje descubriendo otras islas entre las que se destacaban La Española (ocupada actualmente por Haití y Dominicana) y Juana (Cuba).
Regresó a España (dejando en La Española una pequeña guarnición), con el fin de contarles a los reyes que había llegado a las Indias. Cuando regresó a España tuvo un gran recibimiento por parte de los reyes. A partir de allí se suceden varios viajes, pero ninguno con el éxito que tuvo el primero.
El encuentro permitió que América recibiera un gran legado cultural, de adelantos y de expresiones artísticas no sólo occidentales sino también orientales, y que Europa percibiera la riqueza cultural, los avances, el ingenio y el arte del Nuevo Mundo.
El Día de la Hispanidad es una conmemoración propuesta inicialmente en España hacia 1915 y secundada por los países hispanoamericanos, celebrada el 12 de octubre.
La llegada de Cristóbal Colón a América está considerada como uno de los hechos más importantes de la historia universal por las consecuencias que tuvo y debe relacionarse con el primer viaje alrededor del mundo realizado por la tripulación de Fernando de Magallanes pocos años después, que abrió paso a la conquista del mundo por parte de Europa.
Otra importante consecuencia de la llegada de los europeos a América, fue la difusión mundial de los alimentos que habían sido desarrollados por las culturas americanas y que hoy se estima constituyen el 75% de los alimentos consumidos por la Humanidad.
Por otro lado, los españoles primero y los europeos después llevaron consigo a América animales tan útiles como los caballos, los burros, y demás ganado como las vacas castellanas, los bueyes, las ovejas y animales de granja como los cerdos, las gallinas / gallos, los conejos… Así como ciertos árboles frutales, la cebada, la avena, el centeno y el trigo de la Península Ibérica y la caña de azúcar de las islas Canarias o Madeira, que tanto éxito tuvo en el Caribe o el mismísimo café de las colonias de África.
La llegada de Colón a América causó también una gran expansión de la navegación y el comercio entre pueblos que se volvió mundial.
El encuentro fue terrible para los habitantes del Nuevo Mundo. Los europeos se apropiaron de las tierras y obligaron a los indígenas a trabajar en minas, les impusieron una religión y una forma de vida nuevas, desaparición de los sistemas políticos y organizativos de los pueblos amerindios, pérdida definitiva de su soberanía, desaparecieron numerosas lenguas autóctonas y casi extinción de otras. La destrucción de las obras culturales de los pueblos originarios. Inferiorización y desprecio por las culturas originarias y desconocimiento de la naturaleza humana de los pueblos originarios al ser reducidos a la categoría de “encomendados” sometidos a colonizadores europeos, en el caso de la conquista española.
Cristóbal Colón
(1451-1506) Navegante y descubridor, tal vez de origen genovés.
Al servicio de España, descubrió el Nuevo Mundo el 12 de octubre de 1492, fue el primer almirante, virrey, y gobernador de las Indias, y enseño a los hombres de mar de su tiempo el camino a seguir para ir y volver de América.
Tras su muerte, se le enterró inicialmente en Valladolid y posteriormente fue trasladado al Monasterio de la Cartuja en Sevilla. Por deseo de su hijo Diego, vuelve a ser trasladado más tarde a Santo Domingo en 1542.
Luego de la conquista de la isla de Santo Domingo en 1795 por los franceses, se trasladan sus restos a La Habana, y tras la guerra de la independencia de Cuba en 1898, es trasladado por el crucero Conde de Venadito hasta la Catedral de Sevilla, donde reposan en un suntuoso catafalco.
Pruebas de ADN realizadas en 2006 determinaron que los huesos atribuidos al almirante que están en la catedral de Sevilla sí son los de Cristóbal Colón. La afirmación se basó en el estudio del ADN comparado con el de su hermano menor Diego Colón y con los de su hijo Hernando Colón.