Nikolett Bogár, una modelo de 26 años de Hungría, ha decidido abandonar la pasarela para centrarse en la psicología. Bogár, que ha desfilado para marcas como Chanel, Dior y Gucci, ha explicado que decidió dejar la moda porque cree que es una industria “nociva”.
“La moda es una industria que está muy centrada en la apariencia, y eso puede ser muy perjudicial para la salud mental de las personas”, ha declarado Bogár. “Muchos modelos sufren de trastornos alimenticios, problemas de autoestima y ansiedad. Yo misma he sufrido de estos problemas, y por eso he decidido dejar la moda”.
Bogár también ha criticado la industria de la moda por su impacto medioambiental. “La industria de la moda es una de las más contaminantes del mundo”, ha señalado. “La producción de ropa genera una gran cantidad de residuos y emisiones de gases de efecto invernadero. Yo no quiero ser parte de una industria que está destruyendo el planeta”.
Bogár ahora se centra en su carrera como psicóloga. Quiere ayudar a otras personas que sufren de trastornos alimenticios o problemas de autoestima. También quiere trabajar para promover la sostenibilidad en la industria de la moda.
La decisión de Bogár de abandonar la pasarela es un ejemplo de cómo la industria de la moda está empezando a ser cuestionada. Cada vez más personas están conscientes de los problemas que esta industria genera, y están buscando alternativas más sostenibles y respetuosas con la salud mental.
Y es que la industria de la moda no siempre protege a sus modelos. De hecho, existen una serie de problemas que afectan a los modelos, entre los que se incluyen:
- Trastornos alimenticios: La industria de la moda está muy centrada en la apariencia, y esto puede llevar a que los modelos desarrollen trastornos alimenticios como la anorexia o la bulimia. Estos trastornos pueden tener graves consecuencias para la salud física y mental de los modelos.
- Acoso sexual: Los modelos también pueden ser víctimas de acoso sexual por parte de los agentes, los fotógrafos o los diseñadores. Este acoso puede tener un impacto devastador en la salud mental de los modelos.
- Explotación laboral: Los modelos a menudo trabajan largas horas y bajo condiciones difíciles. Pueden estar sometidos a presiones para que acepten trabajos sin remuneración o con salarios bajos.
La industria de la moda está empezando a tomar medidas para abordar estos problemas. Por ejemplo, algunas empresas han adoptado políticas contra el acoso sexual y la explotación laboral. También se han creado organizaciones que trabajan para proteger los derechos de los modelos.
Sin embargo, todavía queda mucho por hacer. La industria de la moda necesita hacer más para garantizar que sus modelos sean tratados con respeto y dignidad.
Aquí hay algunas cosas que la industria de la moda podría hacer para proteger a sus modelos y que ella defiende:
- Implementar políticas contra el acoso sexual y la explotación laboral. Estas políticas deben ser claras y concisas, y deben ser aplicadas de manera consistente.
- Ofrecer programas de apoyo a los modelos. Estos programas podrían proporcionar asesoramiento sobre salud mental, nutrición y finanzas.
- Crear un entorno más diverso e inclusivo. Esto ayudaría a reducir la presión que sienten los modelos para cumplir con los estándares de belleza tradicionales.
Al tomar estas medidas, la industria de la moda podría ayudar a crear un entorno más seguro y saludable para sus modelos.
Existen una serie de protocolos ambientales en la moda. Estos protocolos tienen como objetivo reducir el impacto medioambiental de la industria de la moda, que es una de las más contaminantes del mundo.
Entre los protocolos ambientales más importantes en la moda se encuentran los siguientes:
- El Pacto de la Moda: Este pacto fue lanzado en 2019 por la Organización de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (ONU Medio Ambiente) y reúne a más de 1.500 empresas de la industria de la moda. El Pacto se compromete a reducir el impacto medioambiental de la industria en un 30% para 2030.
- La Iniciativa de Transparencia de la Cadena de Suministro de la Moda: Esta iniciativa fue lanzada en 2017 por la Fundación Ellen MacArthur y reúne a más de 250 empresas de la industria de la moda. La iniciativa se compromete a mejorar la transparencia de la cadena de suministro de la moda para que sea más fácil identificar y abordar los problemas medioambientales.
- La Certificación de la Industria de la Moda Sostenible: Esta certificación fue lanzada en 2014 por la Global Sustainable Fashion Council y reconoce a las empresas de la industria de la moda que cumplen con los más altos estándares de sostenibilidad.
Además de estos protocolos, también existen una serie de iniciativas individuales que las empresas de la moda están tomando para reducir su impacto medioambiental. Estas iniciativas incluyen el uso de materiales reciclados y sostenibles, la reducción de los residuos y la mejora de la eficiencia energética.
La industria de la moda está empezando a tomar conciencia de su impacto medioambiental, y está tomando medidas para reducirlo. Sin embargo, todavía queda mucho por hacer. La industria necesita seguir trabajando para desarrollar nuevas formas de producción y consumo que sean más sostenibles.